El canciller argentino, Felipe Solá, responsabilizó hoy al ministro de Economía de Brasil, Paulo Guedes, por la rigidez en las negociaciones del Mercosur. En una entrevista con O Globo, aseguró que el Gobierno argentino fue agredido y que no hay debate posible con Brasil.
Por qué importa. Las tensiones en el bloque giran en torno a la baja o no del Arancel Externo Común (AEC) y encontraron uno de sus picos máximos en la cumbre de presidentes del Mercosur, donde Argentina traspasó la presidente pro tempore a Brasil.
En detalle. Solá dijo que la decisión de Brasil de bajar el AEC se funda en la idea errónea de que esta medida bajará los precios y que, de avanzar en esta medida, Brasil no tendría en cuenta a los sectores productivos. Agregó que el miembro más interesado por preservar el bloque es Argentina y que Brasil tuvo actitudes muy duras. Reveló también que el ministro de Economía brasileño se negó a hablar con su par argentino, Martín Guzmán, actitud que Solá calificó como “muy negativa”.
Declaraciones
- “Toda idea conjunta sobre el futuro del Mercosur está en duda, básicamente por Brasil y, en menor medida, por Uruguay”.
- “El problema es la visión económica de Brasil y una actitud que lleva a la ausencia de debate. Con Brasil no hay debate, conversaciones entre ministros, debates académicos, entre empresarios, sindicatos, debates francos, todo eso es impensable. Es como si la sociedad no existiera”.
- “Las actitudes hostiles acabaron con el debate. Cuando no hay afectación societatis (intención de los socios de construir y permanecer en una sociedad), todo lo demás queda inmovilizado. El Mercosur está dormido”.
- “Las cosas empezaron mal, con declaraciones negativas que fueron inesperadas para nosotros, con acusaciones de cómo habían votado los argentinos, nunca pensamos que esto pudiera pasar. Luego nos acostumbramos y finalmente lo único que queríamos era no ser insultados”.