29 de septiembre de 2024 - 12.34 / Actualizado: 30 de septiembre de 2024 - 10.20
El presidente Javier Milei encabezó ayer el acto de lanzamiento de La Libertad Avanza como partido nacional en el Parque Lezama de la Ciudad de Buenos Aires, escenario en el que cerró su campaña a diputado en 2021 y que el ecosistema libertario reconoce como origen del fenómeno que terminó en el sillón de Rivadavia.
El punto clave del discurso no tuvo que ver con su contenido, que en el caso de Milei empieza a ser repetitivo para quien lo escucha con frecuencia, sino el tono y los enemigos elegidos. Además de los tradicionales y ya referidos como infectados por el virus KUKA-12, se vio un particular ensañamiento con la prensa y con los sectores de Juntos por el Cambio que hoy no lo acompañan.
"Acá tienen a los trolls, ¿ven que son todos de carne y hueso?, pedazos de soretes", se oyó gritar al presidente de la Nación en la noche porteña. La línea, anticipada en la previa del acto, bajaba a su militancia el recuerdo de lo que el periodismo decía sobre su espacio político (claramente, una subestimación) cuando se lanzó en el mismo Parque Lezama en 2021.
Un aspecto que aparece de manera recurrente en Javier Milei es el rencor frente a la subestimación del pasado. A cada elogio de algún medio o alguna figura internacional responde con el latiguillo "fenómeno barrial". Ese fue el calificativo que le puso el diputado Ricardo López Murphy cuando Milei se lanzó en 2021 y él no lo acompañó para unirse a Juntos por el Cambio. El hoy presidente recuerda de manera constante ese ataque e insulta a López Murphy, pese a que el exministro de Economía es de los diputados no libertarios que más ha apoyado las iniciativas oficiales.
Después del acto, cargado de referencias y agresiones por parte de su militancia al diario Clarín, una extraña coincidencia con los infectados por el KUKA-12, el mandatario apuntó directo contra el accionista mayoritario y presidente del directorio de La Nación, Julio César Saguier.
Después, en X, volvió a la carga y escribió:
El acto tuvo características que apuntan a una balcanización de La Libertad Avanza, como la ausencia de la vicepresidenta Victoria Villarruel, de quién ya dijeron que la consideraban afuera del armado político, y los dardos contra todo posible aliado externo a la nueva estructura partidaria, creada para competir electoralmente sin depender de los partidos que integraban La Libertad Avanza como alianza.
La Libertad Avanza se presentó en comicios anteriores como frente electoral, es decir, un espacio donde confluyen distintos partidos. Los más importantes del frente que llevó a Milei a la presidencia fueron el Partido Libertario, el MID y el Partido Demócrata. El lanzamiento de La Libertad Avanza como partido (no como frente) le permitirá registrarse electoralmente sin necesidad de sellos externos. Una habilitación oportuna ya que:
Además de Javier Milei, la otra oradora de ayer fue "el jefe", Karina Milei, a quién su hermano le delegará el armado partidario y la estrategia de cara a las legislativas del año que viene. En el mundo libertario la ven como posible candidata y primera de lista en alguno de los dos distritos de Buenos Aires (capital y provincia). Fue, estrictamente hablando, el primer discurso político de Karina, que entregó su condición de monje negro y armadora desde las sombras para lanzarse como figura elegible.
El Gobierno vive su peor momento de imagen desde que Milei se puso la banda el 10 de diciembre de 2023. Con una caída profunda en septiembre revelada en todas las encuestas y reconocida por el propio Poder Ejecutivo, el círculo del presidente comienza a ajustar el cálculo de sus decisiones para no volver a cometer errores como el asado con los diputados que votaron contra los jubilados.
Milei busca correr el velo de aquel acercamiento a la casta con un regreso a los orígenes. Apostar más por el 2021 que por el 2023. Si la campaña nacional lo obligó a aliarse con otros partidos, acercarse a sectores de Juntos por el Cambio y forjar un buen vínculo con los medios de comunicación antiperonistas que lo ayudaron en el empujón final, la vuelta al origen implica volver también al estado de soledad en el que todos lo subestiman. Una apuesta arriesgada ya que no es lo mismo encararla cuando sos un outsider candidato a diputado por la Ciudad de Buenos Aires que cuando sos presidente hace casi un año y salió 48 horas antes el dato de que llevaste la pobreza de 41,7% a 52,9%.
En este contexto, el Gobierno procesa su decepción con el devenir de los acontecimientos políticos a través de un gesto que es siempre tentador para los espacios políticos que logran movilizar bases: el de recostarse en su núcleo duro para volver a crecer desde ahí. Ayer logró, por lo pronto, dominar la agenda del día.
