AMIA: las cartas de Biden y el papa Francisco por los 30 años del atentado

18 de julio de 2024 - 12.02

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el papa Francisco
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el papa Francisco — Instagram

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el papa Francisco enviaron cartas a Argentina por el 30° aniversario del atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), donde fallecieron 85 personas.

Por qué importa.

En su carta, el mandatario estadounidense aseguró que, hasta el ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre de 2023, el atentado a la asociación era "el día más mortífero para los judíos desde el Holocausto".

Biden.

"Hoy hace treinta años, un atacante suicida de Hezbollah estrelló una camioneta cargada con 270 kilos de explosivos contra la Asociación Mutual Israelita Argentina, matando a 85 personas e hiriendo a cientos más, destrozando para siempre las vidas de muchas familias. Este mal todavía nos sacude lo más profundo", escribió Biden en su carta. Recordó que el atentado se encuentra en "uno de los capítulos más oscuros de la historia de la realidad" y que "el silencio es complicidad". "Quiero que sepan que no me quedaré callado. Estados Unidos no se quedará en silencio", agregó. 

Además.

Comentó que su administración está implementando la Estrategia Nacional de Estados Unidos para Contrarrestar el Antisemitismo, "el esfuerzo más ambicioso e integral para combatir el antisemitismo en la historia de Estados Unidos". "Conseguimos el mayor aumento jamás realizado en financiación para la seguridad física de organizaciones sin fines de lucro como centros comunitarios, escuelas y sinagogas judías. El Departamento de Educación está investigando el antisemitismo en los campus universitarios. Y en medio de un aumento alarmante de antisemitismo en todo el mundo, nombré a Deborah Lipstadt, que está hoy con todos ustedes, como la primera enviada especial a nivel de embajador para monitorear y combatir el antisemitismo", sostuvo.

Declaración.

"La Torá nos enseña que Dios hizo las estrellas para 'dar luz a la Tierra... y separar la luz de la oscuridad'. Hoy, que este sea nuestro cargo. Recordemos a las víctimas que perecieron ese día hace 30 años. Volvamos a comprometernos a buscar justicia para ellos y sus familias. Y sigamos haciendo brillar la luz de la verdad y la humanidad, incluso en los tiempos más oscuros", publicó Biden.

Papa Francisco.

El sumo pontífice pidió conmemorar el atentado "en un espíritu de recuerdo y reflexión". "La memoria de aquellos que murieron en esa tragedia oscura sigue viva en nuestras oraciones y en nuestro compromiso continuo con la justicia", señaló. También explicó que rendirán homenaje a la tragedia a través del silencio: "La dimensión del silencio, poderosa y reveladora, se presenta ante nosotros no como un vacío, sino como una presencia palpable de aquellos que ya no están. En el silencio escuchamos el eco de las vidas truncadas y sentimos el peso de la ausencia. Pero en el también encontramos la fuerza para enfrentar la realidad del mal y la resiliencia para seguir adelante. A veces el silencio puede expresar un dolor indecible ante la desgracia y, en este día, nos unimos en un silencio que es tanto duelo como esperanza". Agregó que "la memoria" puede ser la guía: "Nos enseña que recordar no es sólo mirar hacia atrás, sino también proyectarnos en esperanza hacia un futuro donde actos tan repudiables de violencia no se repitan. La memoria nos impulsa a tener presentes a los 85 hermanos de aquel 18 de julio de 1994".

Justicia.

El papa Francisco reafirmó que no bajarán los brazos ante la búsqueda de justicia e invitó a las personas de fe y buena voluntad "a unirse en oración y acción".

Profundizá

La carta completa de Joe Biden

Hoy hace treinta años, un atacante suicida de Hezbollah estrelló una camioneta cargada con 70 kilos de explosivos contra la Asociación Mutual Israelita Argentina, matando a 85 personas e hiriendo a cientos más, destrozando para siempre las vidas de muchas familias. Este mal todavía nos sacude hasta lo más profundo. 

Hasta el 7 de octubre, este fue el día más mortífero para los judíos desde el Holocausto, uno de los capítulos más oscuros de la historia de la humanidad que nos recordó a todos que el silencio es complicidad. Y quiero que sepáis: no me quedaré callado. Estados Unidos no se quedará en silencio.

Mi Administración está implementando la Estrategia Nacional de Estados Unidos para Contrarrestar el Antisemitismo, el esfuerzo más ambicioso e integral para combatir el antisemitismo en la historia de Estados Unidos. Conseguimos el mayor aumento jamás realizado en financiación para la seguridad física de organizaciones sin fines de lucro como centros comunitarios, escuelas y sinagogas judías. El Departamento de Educación está investigando el antisemitismo en los campus universitarios. Y en medio de un aumento alarmante de antisemitismo en todo el mundo, nombré a Deborah Lipstadt, que está hoy con todos ustedes, como la primera enviada especial a nivel de embajador para monitorear y combatir el antisemitismo.

Pero todos debemos hacer nuestra parte. Juntos, cada nación, cada gobierno y cada persona, debemos negarnos a dar refugio al odio. Debemos hablar enérgicamente contra el antisemitismo. Y debemos enfrentarnos al terror y la violencia, que se han cobrado demasiadas vidas.

La Torá nos enseña que Dios hizo las estrellas para "dar luz a la Tierra... y separar la luz de la oscuridad". Hoy, que este sea nuestro cargo. Recordemos a las víctimas que perecieron ese día hace 30 años. Volvamos a comprometernos a buscar justicia para ellos y sus familias. Y sigamos haciendo brillar la luz de la verdad y la humanidad, incluso en los tiempos más oscuros.

La carta completa del papa Francisco

Al conmemorar el 30 aniversario del atentado a la AMIA, lo hacemos en un espiritu de recuerdo y reflexión. La memoria de aquellos que murieron en esa tragedia oscura sigue viva en nuestras oraciones y en nuestro compromiso continuo con la justicia.

Para rendir homenaje, ante la tragedia elegimos el silencio. La dimension del silencio, poderosa y reveladora, se presenta ante nosotros no como un vacio, sino comp una presencia palpable de aquellos que ya no estan. En el silencio escuchamos el eco de las vidas truncadas y sentimos el peso de la ausencia. Pero en el también encontramos la fuerza para enfrentar la realidad del mal y la resiliencia para seguir adelante. A veces el silencio puede expresar un dolor indecible ante la desgracia y, en este dia, nos unimos en un silencio que es tanto duelo como esperanza.

La memoria puede ser nuestra guia. Nos enseña que recordar no es sólo mirar hacia atrás, sino también proyectarnos en esperanza hacia un futuro donde actos tan repudiables de violencia no se repitan. La memoria nos impulsa a tener presentes a los 85. hermanos de aquel 18 de julio de 1994.

Hoy, juntos, reafirmamos que no bajamos los brazos ante la búsqueda de justicia. Una justicia que no busca venganza, revanchismo, sino verdad y reparación. Una justida que es esencial no solo para las familias afectadas, sino para la cohesión del tejido social de la nación. El respeto a toda vida humana y a la dignidad que conlleva debe prevalecer sobre el odio y la división, Esta es la base sobre la cual edificamos el bien común, no sólo para honrar a los que hemos perdido, sino para proteger a las generaciones futuras.

Invito a todas las personas de fe y a todas las personas de buena voluntad a unirse en oración y acción, a trabajar incansablemente por un mundo más fraterno, donde la justicia y la paz se abracen, ya que sin justicia no habrá paz duradera ni efectiva.

Que el Dios de la paz nos bendiga con la esperanza y la audacia para llevar a cabo esta misión. Que el consuelo divino alcance a todas las familias que aún lloran a sus seres queridos y les otorgue fortaleza a todos los sobrevivientes que llevan heridas en sus cuerpos y en sus almas. 

Rezo por Ustedes.

Fraternalmente.