La denunciante de Fernando Espinoza dijo temer por su vida

Melody Rakauskas, la denunciante del intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, por presunto "abuso sexual simple" aseguró que sufrió "amenazas de muerte" para que no realizara la denuncia y que la "estigmatizaron para justificar un abuso sexual" en una entrevista ayer en LN+. 

Por qué importa.

Es la primera vez que la víctima habló públicamente sobre el caso desde 2021.

La causa.

Rakauskas denunció a Espinoza en 2021, cuando trabajaba en la municipalidad como secretaria privada bajo su mando. La presunta víctima denunció que fue abusada en su departamento de Capital Federal el 10 de mayo, en la primera o segunda noche desde que comenzó el trabajo. La causa está a cargo de la la jueza María Fabiana Galletti.

En detalle.

En la entrevista en La Cornisa, Rakauskas relató que, en la primera o segunda noche desde que comenzó a trabajar en la municipalidad, Espinoza "se autoinvitó" a su casa. "Vino tres veces. Él salió a desmentirlo diciendo que estaba en la casa de mi entonces pareja que quedaba a la vuelta de mi domicilio, pero están las grabaciones de cada cena en la que él estuvo en mi casa", sostuvo. Además, la denunciante agregó que sentía "mucha presión" por parte de su pareja para reunirse con el intendente: "Él me decía que le tenía que aceptar la cena, que tenía que venir a mi casa porque era normal y solía hacerlo, que no me iba a hacer nada. Mi pareja apoyaba siempre lo que Espinoza hacía, nunca lo contradecía. Yo me sentía entre medio de dos personas con poder".

La versión de Rakauskas.

"Cuando le dije a Fernando Espinoza 'no me toques', se lo dije muy clarito. 'No quiero que me toques, salí de encima mío'. Era una pelea cuerpo a cuerpo. No tuvo piedad esa noche. Fue uno de los peores momentos de mi vida. Ahí empezó una historia de terror", señaló Rakauskas. La denunciante agregó que a la mañana siguiente del presunto abuso fue a trabajar a la municipalidad y que tenía miedo de que la "atacaran adentro [del edificio] o saliendo". También aseguró que, al llegar, Espinoza la llamó a su despacho: "Yo tenía la cara hinchada de haber llorado toda la noche. Y este cara rota cuando me cita a su despacho, me pregunta: '¿Qué te pasa gordita? ¿estás bien?' Parecía que eran dos personas diferentes, que tenía a un Fernando Espinoza de la municipalidad y uno abusador en mi domicilio".

Amenazas de muerte.

Rakauskas sostuvo que habría recibido amenazas de muerte para que no denuncie. "Yo tenía a Gustavo Cilia [amigo de Espinoza] en mi domicilio y sino me llamaba constantemente diciéndome que lo mejor para que no me pase nada era que saque la denuncia inmediatamente. Me querían hacer firmar un documento", sostuvo, y añadió: "Denunciar me costó hasta amenazas de muerte. Tuve que soportar que me dijeran que tenía los días contados".

Declaración.

"Trataron de estigmatizarme y desmentir mis hechos, hablando cosas de mí que están muy lejos de la realidad. Ensuciaron mi imagen injustamente para tratar de justificar por todos los medios que lo que hizo Fernando Espinoza estuvo bien", remarcó Melody Rakauskas.