Reapertura de causas de víctimas del terrorismo: ¿Es posible la propuesta de Villarruel?
29 de agosto de 2024 - 09.31
29 de agosto de 2024 - 09.31
La vicepresidenta Victoria Villarruel declaró el pasado martes que buscaría reabrir todas las causas de víctimas del terrorismo. Aunque su definición de "terrorismo" no fue clara -habló del sufrimiento de las víctimas "en los '70, la AMIA y la actualidad"-, sí especificó que la reapertura se enfocaba en las víctimas de organizaciones guerrilleras antes y durante la última dictadura cívico-militar como Montoneros o el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). La posibilidad de reapertura de las causas.
El debate alrededor de los juicios a líderes de las organizaciones guerrilleras de los '70 es algo que protagonizó la política desde la llegada del Gobierno de Javier Milei. Villarruel consideró que las guerrillas fueron "ensalzadas, vanagloriadas y elevadas" por el Estado durante los años del kirchnerismo, y que por eso muchos quedaron sin condena. Pero la historia dice otra cosa. Cientos de integrantes de las guerrillas fueron secuestrados, torturados y desaparecidos antes de la vuelta de la democracia en un plan sistemático de desaparición forzada y exterminio de la última dictadura militar. Dichas personas no tuvieron juicios ni garantías constitucionales.
Durante el mandato de Alfonsín, se dispuso el juicio de 7 de los líderes de Montoneros, de tendencia peronista, y el ERP, socialista y trotskista. De esos, solo se juzgaron a dos, Mario Firmenich y Ricardo Obregón Cano, debido a que el resto permaneció oculto o exiliado. Aún así, dichos juicios fueron indultados en los '90 durante el gobierno de Carlos Saúl Menem, junto con los de aquellos militares represores. En 2004, en gestión de Néstor Kirchner, los juicios contra los militares se reabrieron, aunque no los de los líderes guerrilleros.
Villarruel afirmó el martes que solicitaría la reapertura de causas, aunque no especificó cuándo ni cómo. Aún así, ni la vicepresidenta ni el Poder Ejecutivo tienen la facultad de hacerlo: para ello deberían pedirlo a la Justicia. Fuera de esto, la diferencia principal entre los crímenes de militares represores y guerrillas se debe a su carácter temporal. Lo militares realizaron dichos delitos cuando se encontraban en poder del Estado, lo que convierte a sus actos en crímenes de lesa humanidad, los cuales son imprescriptibles. Esto quiere decir que no tienen limitación temporal: los culpables pueden ser juzgados hasta hoy.
"Los únicos delitos que no prescriben son los de lesa humanidad o contra la humanidad. Crímenes de tal magnitud que la humanidad decidió exhibirlos, juzgarlos y no repetirlos, como los del nazismo o de la última dictadura", explicaron desde el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), y agregaron: "Son delitos de lesa humanidad cuando se cometen como parte de un ataque generalizado o sistemático a la población civil por parte de un Estado o con acuerdo estatal o de organizaciones que tengan control territorial y funcionen como un Estado".
Por esto mismo los tribunales determinaron repetidas veces que los delitos de Montoneros o el ERP son causas ya juzgadas. La más cercana ocurrió el año pasado, cuando la jueza federal María Servini ratificó que los delitos prescribieron porque no se trataban de crímenes de lesa humanidad, de guerra o violaciones a los derechos humanos. Fue en rechazo de un pedido de asociaciones que defienden a militares represores y que buscaban reabrir la causa alrededor del atentado cometido por Montoneros el 2 de julio de 1976 en la Superintendencia de Seguridad Federal.