Scarlett Johansson vs. OpenAI: la acusación de la actriz a la empresa de robarle su voz

Scarlett Johansson acusó hoy al director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, de robar su voz para utilizarla en la nueva versión de ChatGPT 4.0, según difundió ayer NPR en un comunicado de la actriz.

Por qué importa.

El conflicto de Johansson y OpenAI ocurre solo unos meses después de la huelga del sindicato de actores de Hollywood, donde reclamaban la protección de su imagen ante el uso de la inteligencia artificial. La huelgo llegó a su fin en noviembre de 2023, cuando se les otorgaron "disposiciones sin precedentes para el consentimiento y la compensación que protegerán a los miembros de la amenaza de la inteligencia artificial".

También importa.

En su comunicado la actriz pidió por "una resolución transparente y la aprobación de la legislación apropiada para garantizar que los derechos individuales estén protegidos" en una época marcada por "los deepfakes y la protección de la propia imagen, trabajo e identidades".

Qué dijo Scarlett Johansson.

La actriz detalló que, en septiembre del año pasado, Altman se comunicó con ella para que sea la asistente de voz del ChatGPT 4.0. "Me dijo que sentía que, al ser la voz del sistema, podía cerrar la brecha entre las empresas de tecnología y los creadores y ayudar a los consumidores a sentirse cómodos con el cambio sísmico que afecta a los humanos y la inteligencia artificial", explicó. Aunque Johansson rechazó la oferta, 9 meses después OpenAI publicó un demo de la nueva asistente Sky, cuya voz era muy similar a la de la actriz. "Mis amigos, familia y el público general notaron lo mucho que sonaba como yo", sostuvo.

Her.

La actriz remarcó que la similitud "era intencional" luego de que Altman tuiteara la palabra "ella" en X en referencia a la película Her de Spike Jonze, donde Johansson interpreta la voz de Samantha, una asistente virtual que forma una relación íntima con un humano. También explicó que dos días antes del lanzamiento de ChatGPT 4.0, Altman se comunicó con su agente y le "pidió que lo reconsiderara", aunque la voz de Sky salió a la luz sin que pudieran contactarse. "Como resultado de sus acciones, me vi obligada a contratar un asesor legal, quien escribió dos cartas al Sr. Altman y OpenAl, exponiendo lo que habían hecho y pidiéndoles que aclararan el proceso exacto mediante el cual crearon la voz Sky. En consecuencia, OpenAl aceptó a regañadientes eliminar la voz", agregó.

Qué dijo OpenAI.

OpenAI comunicó ayer que suspendieron el uso de Sky luego de que surgieran "preguntas sobre la elección de las voces". "Creemos que las voces de IA no deben imitar deliberadamente la voz distintiva de una celebridad: la voz de Sky no es una imitación de Scarlett Johansson, sino que pertenece a una actriz profesional diferente que utiliza su propia voz natural. Para proteger su privacidad, no podemos compartir el nombre de dicha actriz", detalló la empresa. También explicaron que la grabación de las 5 voces disponibles -Breeze, Cove, Ember, Juniper y Sky- se grabaron en San Francisco el verano pasado.

 Profundizá

El comunicado.

El septiembre pasado recibí una oferta de Sam Altman para ser la asistente de voz del actual sistema de ChatGPT 4.0. Me dijo que sentía que al ser la voz del sistema, podía cerrar la brecha entre las empresas de tecnología y los creadores y ayudar a los consumidores a sentirse cómodos con el cambio sísmico que afecta a los humanos y la inteligencia artificial. Dijo que sentía que mi voz sería reconfortante para la gente.

 

Rechacé la oferta después de mucha consideración y por razones personales. Nueve meses después, mis amigos, familia y el público general notaron lo mucho que el nuevo asistente de voz llamado Sky sonaba como yo.

 

Cuando escuché el demo publicado, quedé sorprendida, enojada e incrédula de que el Sr. Altman usara una voz que sonaba tan inquietantemente similar a la mía, tanto que mis amigos más cercanos y los medios de comunicación no podían notar la diferencia. Altman incluso insinuó que la similitud era intencional y tuiteó una sola palabra "ella", en referencia a la película en la que le di voz a un sistema de chat, Samantha, que forma una relación íntima con un humano.

 

Dos días antes del lanzamiento de la demostración de ChatGPT 4.0, el Sr. Altman se comunicó con mi agente y me pidió que lo reconsiderara. Antes de que pudiéramos conectarnos, el asistente de voz ya estaba disponible.

 

Como resultado de sus acciones, me vi obligada a contratar un asesor legal, quien escribió dos cartas al Sr. Altman y OpenAl, exponiendo lo que habían hecho y pidiéndoles que aclararan el proceso exacto mediante el cual crearon la voz "Sky". En consecuencia, OpenAl aceptó a regañadientes eliminar la voz "Sky".

 

En una época en la que todos lidiamos con los deepfakes y la protección de nuestra propia imagen, nuestro propio trabajo, nuestras propias identidades, creo que estas son preguntas que merecen una claridad absoluta. Espero con interés una resolución en forma de transparencia y la aprobación de legislación apropiada para ayudar a garantizar que los derechos individuales estén protegidos.