Al borde del quiebre: el aumento de tensiones tras la reunión de bloque de la UCR

Los diputados del bloque de la Unión Cívica Radical (UCR) se reunieron ayer por la tarde para discutir el destino de los cinco diputados que apoyaron el veto presidencial sobre el aumento de las jubilaciones. En aquel encuentro, las tensiones se acrecentaron entre los presentes y se generó una clara grieta entre aquellos que apoyan y los que se distancian del oficialismo. 

En contexto.

Los radicales Luis Picat, Pablo Cervi, José Tournier, Mariano Campero y Martín Arjol se reunieron con el presidente Javier Milei y parte de su Gabinete el día anterior al tratamiento del veto en la Cámara de Diputados. Un día después, en el recinto, votaron a favor del veto que rechazaba la suba de los haberes jubilatorios. Su accionar generó el rechazo del presidente del bloque, Rodrigo De Loredo, que dijo que "no le pareció bien" y de la Convención Nacional de la UCR, que amenazó con elevar su conducta al Tribunal de Ética del partido. Finalmente, unos días más tarde, la convención resolvió la suspensión preventiva de los cuatro afiliados hasta que el tribunal tome una decisión sobre su conducta. Tournier no fue incluido porque no pertenece al partido, pero si al bloque.

Por qué importa.

El apoyo al veto sorprendió dentro del bloque debido a que el proyecto fue impulsado por el radicalismo en ambas cámaras y sus miembros informantes, aquellos que detallan la iniciativa a sus compañeros en el recinto, en la Cámara baja habían sido también de la bancada.

La reunión.

El encuentro de los diputados que ocurrió ayer generó fuertes tensiones. Entre ellas, principalmente divisiones entre aquellos cercanos al referente Facundo Manes y aquellos más íntimos con el oficialismo. Tarde a la noche el bloque publicó un comunicado que no tuvo el acuerdo de todos. Allí, se decía que la bancada decidió continuar con su integración actual "sin excluir a nadie por su manera de pensar, más allá de decisiones externas a este cuerpo que pretenden traspasar su ámbito de competencia". Esto último en clara referencia a la Convención Nacional, dirigida por Gastón Manes, hermano de Facundo. El comunicado parecía mostrar la postura de De Loredo, que consideró "una irresponsabilidad" la intrusión de la convención. También se alinea con la posición del gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, expresidente del Comité Nacional del partido entre 2017 y 2021, además de ser ex jefe de bloque de Juntos por el Cambio en el Senado. "Todas las diferentes posiciones y opiniones, por más minoritarias que sean dentro del bloque, son respetadas y tenidas en cuenta pero, como en cualquier cuerpo colegiado, deben primar las decisiones del colectivo mayoritario, sin excluir a quien piense de una manera distinta.
La Unión Cívica Radical enfrenta hoy diversas realidades, en muchos casos con responsabilidad de gestionar gobernaciones y municipios. En este marco, aspiramos a seguir representando a millones de argentinos que nos votaron y que esperan de nosotros una actitud responsable y madura para enfrentar los enormes desafíos que hoy tiene nuestro país", cerraron el comunicado.

Los rechazos.

Varios diputados cercanos a Manes hicieron públicas sus disidencias: 

• "Se llevó a cabo una votación con la participación de solo 4 o 5 personas, un número que claramente no representa la mayoría del bloque. Así no se definen los caminos a seguir", escribió Marcela Coli en X.
• "¡Felicitaciones! ¡Ahora a explicarlo a los jubilados! ¡A docentes, no docentes y estudiantes y a los gobernadores que tienen que hacer el ajuste! ¡¡¡¡Y nada del relato K populista o el destituyente!!!!", publicó Danya Tavela.
• "Desmiento la información contenida en este comunicado que no expresa lo sucedido en la reunión. No hubo votación y menos aun una decisión mayoritaria de nada. Entre 4 o 5 no pueden imponer sumisión al oficialismo", sostuvo Fernando Carbajal.

Además.

Los diputados suspendidos por la Convención Nacional mostraron su oposición frente a la medida. Hoy, el diputado Martín Arjol retuiteó a un usuario de X que comparaba a la convención con el kirchnerismo. "Nunca lo hicieron con Ricardo Alfonsín, ni con Leopoldo Moreau, ni con Leandro Santoro. Radikalistas", detallaba. Además, Campero y Picat defendieron su apoyo al veto ayer en LN+ y hablaron de una "alianza subterránea" de partes del radicalismo con el kirchnerismo para "desestabilizar al Gobierno".